Antiguo régimen en Francia
Las estructuras sociales y administrativas del Antiguo Régimen en Francia fueron el resultado de siglos de construcción nacional, actos legislativos (como la Ordenanza de Villers-Cotterêts), conflictos internos y guerras civiles, que resultaron en un confuso rompecabezas de privilegios locales y diferencias históricas hasta que la Revolución francesa trajo una supresión radical de la incoherencia administrativa.
El Antiguo Régimen (en francés Ancien Régime) es un término en principio aplicado a la Historia de Francia, pero la extensión de su uso la ha convertido en una categoría historiográfica aplicada a Europa Occidental durante la Edad Moderna.
Gran parte de la centralización política de la monarquía feudal de los Capetos, se había perdido durante la Guerra de los Cien Años, y los intentos de ladinastía Valois por restablecer el control sobre el dividido país fueron desbaratados por las Guerras de Religión. La mayor parte de los reinados deEnrique IV, Luis XIII y los primeros años del de Luis XIV se concentraron en la centralización administrativa. A pesar de la noción de monarquía absoluta (tipificada por el derecho del rey a emitir el documento conocido como lettre de cachet) y los esfuerzos de los reyes por crear un Estadocentralizado, la Francia del Antiguo Régimen permanecía como un país con irregularidades sistemáticas: divisiones y prerrogativas administrativas, fiscales, legales, judiciales y eclesiásticas; frecuentemente entrecruzadas. Mientras tanto, la nobleza francesa luchaba por mantener sus propios derechos en materia de gobierno y justicia local, y poderosos conflictos internos (como la Fronda) protestaban contra la centralización
A mediados del siglo XV, Francia era significativamente menor que en la Edad Contemporánea,2 y numerosas provincias fronterizas (como Rosellón,Cerdaña, Calais, Béarn, Baja Navarra, Condado de Foix, Condado de Flandes, Artois, Lorena, Alsacia, Trois-Évêchés, Franco Condado, Saboya,Bresse, Bugey, Gex, Niza, Provenza, el Delfinado, y Bretaña) eran autónomos o estaban bajo otras entidades políticas (como el Sacro Imperio o laCorona de Aragón)había también enclaves extranjeros, como el Comtat Venaissin. Además, ciertas provincias dentro de Francia eran ostensiblemente estados nobiliarios de familias importantes, como el Bourbonnais, Marche, Forez y Auvernia, en manos de la Casa de Borbón, hasta que fueron integradas a la fuerza al dominio real en 1527 tras la caída de Carlos III de Borbón).
Desde finales del XV hasta el siglo XVII, Francia se embarcó en una expansión territorial masiva, y en el intento de integrar sus provincias en un conjunto administrativo unido.
Adquisiciones 1461-1789:
- Luis XI - Provenza (1482), Delfinado (1461, bajo control francés desde 1349)
- Francisco I - Bretaña (1532)
- Francisco I - Cominges (1540, bajo control de la corona desde 1453)
- Enrique II - Calais, Trois-Évêchés (1552)
- Enrique IV – Condado de Foix (1607)
- Luis XIII - Béarn Baja Navarra (1620, bajo control francés desde 1589 como parte de las posesiones personales de Enrique IV)
A pesar de los esfuerzos de los reyes por crear un estado centralizado sobre ese conjunto provinicial, Francia permaneció durante ese periodo como un rompecabezas de privilegios locales y diferencias históricas, y el poder arbitrario del monarca (implicado por la expresión monarquía absoluta) era de hecho muy limitado por las particularidades históricas y regionales. Las divisiones y prerrogativas administrativas, fiscales, legales, judiciales y eclesiásticas, se entrecruzaban frecuentemente (por ejemplo, los obispados y diócesis raramente coincidían con las divisiones administrativas). Ciertas provincias y ciudades habían ganado privilegios especiales (como tipos impositivos menores en la gabela, el impuesto de la sal). El sur de Francia estaba gobernado por la ley escrita adaptada del derecho romano, mientras que el norte lo estaba por el derecho consuetudinario (que en 1453 fue codificado de forma escrita).
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